Hoy hablaremos un poco acerca de la importancia de velar también por nuestra salud mental en esta época de confinamiento.
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Hablaremos de un punto muy importante a tener en cuenta cuando hablamos de Salud Mental y es mantener a raya a la mente del monito (o Monkey Mind). Este concepto te ayudará a entender porqué el mindfulness es una técnica que promueve la salud mental.
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En esta época de incertidumbre y dificultades no dejes que tu «monkey mind» esté sin control y campe a sus anchas. Haz que tu mente sea tu aliada.
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Resumen del vídeo
Los orientales dicen que la mente es un mono inquieto al que hay que aprender a controlar. Esta es una idea milenaria cuya veracidad se mantiene hasta nuestros días.
Vivimos atrapados en un ciclo de pensamiento constante. Nuestra forma de vida nos obliga a estar siempre un paso por delante. Tenemos que tener siempre planificado nuestros horarios, nuestras comidas, nuestro día e, incluso, el día siguiente.
Esta anticipación no es necesariamente mala. Es necesaria para organizarnos, convivir y llevar a cabo nuestro día a día. El problema viene cuando esta capacidad para hacer más fáciles nuestras vidas invade nuestra propia vida.
Cuando perdemos de vista el momento, el lugar, la situación en la que nos encontramos porque estamos anticipándonos a lo que va a ocurrir en el momento siguiente; nos desubicamos, olvidamos el presente y dejamos de estar donde tenemos que estar. Esto es: Aquí y ahora.
La imagen del mono inquieto representa a la perfección esta situación. Nuestra mente está constantemente saltando de rama en rama, yendo de un pensamiento a otro, poniéndose en una u otra situación que puede o no puede suceder (casi nunca va a suceder).
¿Por qué esta mente inquieta es tan perjudicial? Porque estamos invirtiendo muchísima energía en situaciones que no van a ocurrir y, lo más importante de todo, estamos desconectados de nuestra realidad; que no es otra que el momento presente. Estamos cazando brujas sin ningún tipo de éxito.
Nuestra vida ha derivado es este estado de pensamiento ininterrumpido. Ni siquiera cuando dormimos nos liberamos de esta espiral. De ahí que muchas veces nos levantemos cansados. Sin embargo, a raíz del confinamiento, saber guardar nuestra paz mental tienen mayor importancia que antes.
El hecho de vernos confinados en nuestros hogares, de no tener medios de distracción o evasión habituales como pasear o ir de tiendas reduce toda nuestra actividad a esencialmente mental. Todo nuestro cansancio procederá de la mente inquieta y eso puede traernos consecuencias muy negativas.
Por ello, Paul Pozuelos nos tra en este vídeo 4 claves para controlar esa mente de monito inquieto en estos tiempos de recogimiento. Aunque nos han anunciado 15 días, no sabemos cuánto tiempo vamos a estar dentro de casa realmente y por ello estos ejercicios son más importantes que nunca:
4 Claves para controlar al monito inquieto:
1. Ponte horarios
Esto es algo que las personas acostumbradas a levantarse para ir a su trabajo les ha pillado de nuevas, pero que los asiduos al trabajo en casa conocen de primera mano. Si empezamos llevando el día de manera desestructurada, la mente nos va a llevar a nosotros.
Es muy importante establecerse unos horarios que cumplir de manera rigurosa. Saber cuanto tiempo nos lleva cada tarea y saber dedicarle el tiempo necesario a cada una de ellas.
Estamos hechos para seguir una rutina. El cuerpo busca hacer las cosas cada día a la misma hora, busca seguir unas pautas ordenadas.
Por ello, seguir un horario estructurada mantendrá estructurada la mente. Si no sabemos establecernos rutinas en estos días de confinamiento, posiblemente nuestra mente acabe desordenada y no podremos controlar al monillo inquieto.
2. No veas tanto las noticias
Estar constantemente conectado, buscando noticias tras noticia, queriendo saber lo que pasa en el mundo es un hábito que produce mucho cansancio mental. Escoge momentos determinados para actualizarte, como cuando te tomas el café o cuando descansas 5 minutos.
Las noticias no van a ir a ninguna parte. Lo que ha pasado, ha pasado. Y si esa noticia realmente es importante, de una manera u otra, llegará a ti.
Además, debemos de recordar que muy poco podemos hacer. Estas noticias están sucediendo en lugares muy remotos a nosotros y es importante que recordemos lo que realmente está en nuestras manos y lo que no.
3. Evita hablar del problema
Lo que decimos y lo que pensamos está muy ligado. A toda palabra le precede un pensamiento y si hablamos de algún tema concreto (como la situación que estamos viviendo) caeremos en el pensamiento recurrente de una situación que no podemos combiar, como dijimos en el punto anterior.
Así, construimos la realidad a través de nuestra palabra. Lo peligroso de esto se conoce como “Rumiar”, como remascar constantemente un pensamiento, lo cual también nos desgasta enormemente a nivel cognitivo, pues si rumiamos significa que no podemos hacer gran cosa para cambiar la situación.
4. Busca un momento para ti
En esta web o en nuestro canal de You Tube podemos encontrar numerosos ejercicios para entrenarnos en la atención plena. Todos son ejercicios muy sencillos y de poca duración, que puedes hacer en el trabajo, en casa, en el coche, caminando por la calle, …
Sólo te exigen 5 minutos que puedes tomarte de descanso en tus quehaceres y te reportarán un sinfín de beneficios, que te ayudarán a llevar de mejor manera este tiempo de confinamiento, así como tu día a día en general de manera más plena.
Por último, este vídeo nos trae un breve ejercicio de mindfulness con sonidos, que constituye un muy buen punto de partida para comenzar en el mundo de la atención plena y la metacognición.
Tal vez, así podamos aprender a controlar al indómito monillo inquieto y podamos vivir de una manera más consciente o, por lo menos, estar un paso más cerca de ellos.