Si te interesa descubrir cómo el juego puede convertirse en una herramienta real para entrenar la atención, el autocontrol y otras habilidades clave para el aprendizaje, en Neuromindset Schools encontrarás recursos, propuestas prácticas y soluciones pensadas para centros educativos y profesionales.
Actividades navideñas para desarrollar la atención y las funciones ejecutivas en niños
La Navidad es una oportunidad perfecta para algo más que descansar: el cerebro en desarrollo disfruta especialmente los cambios de rutina, los contextos nuevos y los días llenos de estímulos significativos. Cada interacción familiar -un juego, un paseo, un rato de lectura- puede convertirse en un entrenamiento real para habilidades fundamentales como la atención, el autocontrol, la memoria de trabajo, la flexibilidad cognitiva y la planificación.
Con esta idea en mente, proponemos una serie de actividades navideñas que transforman momentos cotidianos en oportunidades para fortalecer el desarrollo cognitivo y emocional de los niños de una forma sencilla, divertida y natural, tanto en casa como en el aula.
1. “Simón dice… versión Navidad” (autocontrol y atención infantil)
Este clásico juego es una herramienta muy eficaz para entrenar el autocontrol y la atención.
Cuándo usarlo: mientras esperáis la cena, la merienda, en una tarde fría en casa o en el colegio o para bajar revoluciones después de volver del parque o el recreo.
Cómo aplicarlo:
Reunidos en el salón, en el aula o el gabinete, se dan instrucciones como: “Simón dice… toca tu gorro de Navidad”, “Simón dice… camina como un reno”. En algún momento se introduce una orden sin decir “Simón dice”, por ejemplo: “Ahora haz de Papá Noel”. El niño debe frenar el impulso de actuar.
Qué se entrena: control inhibitorio y atención sostenida.
2. Búsqueda de imágenes con adornos navideños
Una actividad sencilla que entrena la atención selectiva sin necesidad de pantallas.
Cuándo usarlo: al decorar la casa o el aula, antes de poner el árbol o mientras organizáis adornos.
Cómo aplicarlo:
Se colocan sobre la mesa varias imágenes o pequeños adornos por parejas (estrellas, bolas, renos). Se muestra uno de ellos y se pide al niño que encuentre su pareja entre el resto.
Qué se entrena: capacidad para focalizar la atención y filtrar estímulos distractores.
3. “Veo, veo” dentro del cuento navideño
El juego tradicional adaptado para trabajar la atención durante la lectura.
Cuándo usarlo: antes de dormir o en un momento tranquilo de la mañana o la tarde.
Cómo aplicarlo:
Mientras se lee un cuento, se proponen retos como: “Veo algo que brilla”, “veo algo pequeño que vuela”, “veo algo escondido detrás del árbol”.
Qué se entrena: atención dirigida, discriminación visual y paciencia.
4. Cambia las reglas: flexibilidad cognitiva y funciones ejecutivas
Una forma muy eficaz de entrenar la capacidad de adaptarse a cambios.
Cuándo usarlo: al recoger el aula, el salón o la habitación después de jugar.
Cómo aplicarlo:
Se empieza recogiendo objetos según una norma (“solo lo rojo”) y, tras unos segundos, se cambia la regla (“ahora solo lo blando”, “ahora lo que tenga ruedas”).
Qué se entrena: flexibilidad cognitiva y adaptación a nuevas reglas.
5. Construir un adorno con instrucciones cambiantes
Ideal para momentos de manualidades.
Cuándo usarlo: en una tarde de lluvia o durante la preparación de adornos navideños.
Cómo aplicarlo:
Se comienza creando un adorno sencillo. A mitad del proceso se introducen cambios: “ahora debe tener algo azul”, “tiene que parecer una estrella”, “añadimos algo que haga ruido”.
Qué se entrena: memoria de trabajo y capacidad de adaptación.
6. “Los gnomos desordenados”: recoger por categorías
Transformar una tarea rutinaria en un juego cognitivo.
Cuándo usarlo: cuando la casa empieza a llenarse de juguetes y regalos.
Cómo aplicarlo:
Se propone recoger objetos siguiendo distintas consignas: primero solo los suaves, después los que hacen ruido, luego los redondos.
Qué se entrena: planificación, organización y velocidad de procesamiento.
7. Carrera de renos con atención plena
Una actividad inspirada en el mindfulness infantil.
Cuándo usarlo: cuando el niño está muy activado o antes de un momento que requiere calma.
Cómo aplicarlo:
Se camina por la casa como si se fuera un reno muy lento, después rápido, y de nuevo lento, prestando atención a los pasos y al cuerpo.
Qué se entrena: autorregulación emocional y conciencia corporal.
8. La misión secreta de los elfos
Introducir estructura a través del juego simbólico.
Cuándo usarlo: antes de salir de casa o cuando se necesita ordenar una secuencia de acciones.
Cómo aplicarlo:
Se plantea una misión con varios pasos: llevar un mensaje a una habitación, recoger un objeto por el camino y apagar una luz.
Qué se entrena: planificación y memoria de trabajo.
9. Diario de emociones navideñas
Un espacio para integrar la experiencia emocional del día.
Cuándo usarlo: antes de dormir, especialmente tras días intensos.
Cómo aplicarlo:
El niño dibuja o escribe qué emoción ha sido la más fuerte del día y qué la provocó.
Qué se entrena: metacognición emocional y regulación afectiva.
10. Baile congelado navideño para entrenar el autocontrol infantil
Movimiento y autocontrol en un mismo juego.
Cuándo usarlo: cuando necesitan moverse pero se quiere evitar el desorden.
Cómo aplicarlo:
Se pone música navideña y se detiene de forma inesperada. Cuando la música para, el niño debe quedarse completamente quieto.
Qué se entrena: control inhibitorio y atención auditiva.
Para seguir profundizando
Estas actividades muestran cómo, con pequeños cambios en el día a día, es posible entrenar de forma natural habilidades clave para el aprendizaje y el bienestar emocional de los niños. Si quieres llevar este enfoque un paso más allá, conocer cómo estructurarlo en el aula o acceder a recursos específicos para centros educativos, puedes hacerlo a través de Neuromindset Schools.


